Un grupo de cristianos salió a difundir el evangelio, y muchas personas aceptaron a Jesús como su Salvador y Redentor, incluyendo turistas, jóvenes y mujeres que trabajaban detrás de las ventanas del famoso Barrio Rojo de Ámsterdam.
El Barrio Rojo de Ámsterdam
El Barrio Rojo de Ámsterdam, conocido localmente como De Wallen, es uno de los destinos más icónicos y controvertidos de la ciudad. Famoso por sus vitrinas iluminadas y su vida nocturna, es un lugar donde la prostitución y los negocios relacionados con el sexo son legales y se exhiben abiertamente. A lo largo de los años, este barrio ha sido un foco de atención para el turismo, pero también un lugar donde diversas organizaciones buscan llevar apoyo y cambio, incluyendo grupos religiosos que trabajan para compartir su fe y brindar ayuda a quienes viven y trabajan allí.
El llamado de Dios en el corazón de Jolien Sterre
Jolien Sterre de His Voice Music sintió profundamente el llamado de Dios hacia el Barrio Rojo de Ámsterdam. «Compartí con Renate, nuestra violinista, el deseo de alcanzar a personas ajenas a la iglesia. Allí mismo, en Ámsterdam, donde la necesidad era evidente», expresó Jolien. Durante su tiempo devocional, el Señor le inspiró el ministerio «Avivamiento en las Calles». Jolien se puso en contacto con Gideon y Christine de «Revival in the Streets«, y la respuesta fue entusiasta.
Otros ministerios también se unieron para llevar el amor de Jesús a este lugar especial, como «Llamas de Gloria» y «Jóvenes con una Misión». Gideon y Christine, a su vez, se comunicaron con Esther van Wijk de «Bible Inspiration Ministries». Esther está organizando una divulgación para llegar a las mujeres que trabajan detrás de las ventanas. En las semanas previas, se formó un grupo de 15 mujeres para este propósito. Algunos tenían años de experiencia, mientras que otros lo hacían por primera vez. Fue hermoso ver cómo los recién llegados fueron acogidos bajo las alas de Clement van Engel y otros, y cómo comenzaron a dar testimonio del amor de Jesús y a orar por las personas.
Un Ejército con un Solo Propósito
Era un gran ejército con un solo propósito: «proclamar que todos son valiosos para Jesús y que Él dio Su vida en la cruz por nuestros pecados, para que todo aquel que crea en Él tenga vida eterna», dijo Esther para el diario Revive. Cuando comenzó la adoración, un gran grupo de personas se detuvo para escuchar, como si los cielos se abrieran sobre el Barrio Rojo.
