El pastor Matthias Haghnejad, perteneciente a la Iglesia de Irán, ha sido acusado de «moharebeh» delito que en la ley islámica de la Fiqh significa estar en enemistad o en guerra con Dios. Esta acusación puede terminar en la pena de muerte.
El pasado 5 de julio a las 8 y media de la mañana Matthias Haghnejad fue arrestado por las fuerzas de seguridad iraníes que allanaron su hogar ubicado en Karaj. Durante el allanamiento se confiscaron Biblias, panfletos y su computadora personal.
Este domingo Christian Solidarity Worldwide ha informado que el pastor fue interrogado por el juez Mohammad Yari de la Sexta sección del Tribunal Revolucionario de Karaj. Esto duró dos horas y fue acusado de «moharebeh«.
Este nueva forma de acusar a un cristiano es preocupante pues se agudiza la persecución contra los cristianos en Irán ya que en el pasado se les solía implicar en acciones «contra el Estado», «contra el orden público» u otros delitos de seguridad nacional.
La situación es preocupante pues el nuevo Código Penal Islámico, que entró en vigor en 2013, prohibe la pena de muerte en casos de «moharebeh» cuando no hay uso de armas. Sin embargo se ha notado que el gobierno Rouhani ha ejecutado este año a 8 personas acusados de «moharebeh». Estos casos han sido notorios pues entre los ejecutados se encuentra el poeta Ahwazi Arab, y los activistas de derechos humanos Hashem Shaabani y Hadi Rashedi. Los acusados por este delito suelen ser torturados para que obtener confesiones falsas, se les niega el acceso a asistencia jurídica, y los juicios se realizan sin el debido proceso.