Jesse Jackon oró en el funeral de Chavez
El pastor Jesse Jackson, líder de derechos civiles y quien se postuló a la presidencia de los Estados Unidos en dos ocasiones en la década de 1980, viajó a Caracas el jueves para asistir al funeral de Hugo Chávez.
En un artículo de opinión en CNN.com, Jackson dijo que en su viaje a Caracas «iba a reunirse con los líderes políticos, religiosos y de la comunidad» para reiterar el mensaje oficial de la administración del presidente Barack Obama de que Estados Unidos espera fomentar mejores relaciones con Venezuela.
Jackson no formó parte de la delegación oficial de EE.UU. al funeral de Chávez, conformada por el encargado de negocios de la embajada en Caracas, James Derham, el congresista demócrata Gregory Meeks de Nueva York, y el ex diputado William Delahunt de Massachusetts. Actualmente no Estados Unidos no tiene actualmente un embajador en Venezuela.
En su artículo de opinión, Jackson aboga por poner fin a la «retórica caliente de demonización, y a las políticas de aislamiento» que han marcado las relaciones de Estados Unidos y Venezuela en los últimos años.
«Es hora de forjar una relación práctica y productiva que conduzca a la normalización de las relaciones diplomáticas entre los EE.UU. y Venezuela», escribió.
El propio Chávez tampoco fue inmune a la retórica mordaz, como es sabido hablar en las Naciones Unidas en 2006 refiriéndose al entonces presidente George W. Bush como «el diablo».
Jackson, quien escribió en un comunicado en su página de Facebook afirmando estaba «entristecido» por la muerte de Chávez, tiene una historia larga y exitosa de las negociaciones con los líderes extranjeros que Estados Unidos considera hostiles.
En septiembre del año pasado hizo un llamamiento cara a cara con el presidente Jammeh de Gambia Yahya para la liberación de dos ciudadanos estadounidenses que cumplen penas de prisión por traición a la patria en la nación africana. Eso siguió a una negociación de 1999 con el entonces yugoslavo Slobodan Milosevic presidente que dio lugar a la liberación de tres soldados estadounidenses que habían sido retenidos durante más de un mes.
También ha tratado personalmente con el líder cubano Fidel Castro y el fallecido dictador de Iraq Saddam Hussein.
En el funeral la oración ecuménica fue compartida por el Obispo Mario Moronta, el pastor venezolano Alexis Romero Valera de Asambleas de Dios y Jesse Jackson.
«Nos encomendamos a Dios porque esperamos que pueda tender puentes entre Estados Unidos y Venezuela, que podamos avanzar por nuevos puentes, que dejemos atrás la sombra de la muerte (…) que podamos avanzar juntos hacia un territorio más elevado», dijo Jackson durante la ceremonia en la Academia Militar de Caracas.
«Compartimos la pasión del béisbol, compartimos nuestros recursos naturales, juntos combatimos las drogas», destacó el reverendo.
El reverendo también pidió «sabiduría» y «fortaleza» para que Maduro, quien asumirá la tarde de este viernes como presidente encargado, mantenga «vivas las esperanzas» del pueblo venezolano.
«A Nicolás Maduro concédele sabiduría, bríndale fortaleza y entereza, en momentos en que le incumbe mantener vivas las esperanzas y los sueños, en momentos en que toma el relevo», expresó Jackson.
«Hoy en el día que lloramos, lo hacemos porque hemos perdido mucho, pero todavía nos queda mucho: un gobierno estable, una transición ordenada, que va a permitir construir esta gran nación», afirmó.
Además señaló quen «Hugo Chávez alimentó al hambriento, enalteció a los humildes e hizo vibrar sus esperanzas, él les ayudó a cumplir sus sueños».
Un total de 32 jefes de Estado y de gobierno asistieron al funeral de Chávez en la Academia Militar, al suroeste de Caracas, donde yacen en una capilla ardiente sus restos mortales.