La violencia doméstica es una herida profunda que, en muchos hogares, se oculta con la esperanza de que la situación cambie con el tiempo. Sin embargo, la Dra. Marilú Carrera, invitada por la Dra. Esly Carvalho a la Plaza del Encuentro, advierte que callar este problema no genera mejoras, sino que agrava las consecuencias.
Marilú explica que la violencia doméstica no solo afecta a la persona agredida, sino también a los hijos que crecen en un ambiente de miedo, tensión y sufrimiento. Los niños expuestos a estas situaciones pueden desarrollar inseguridades, ansiedad, depresión o incluso repetir patrones de violencia en su vida adulta.
Violencia doméstica: un problema que daña a toda la familia
En la tertulia, se subraya la urgencia de visibilizar y denunciar la violencia dentro del hogar. La indiferencia o el silencio no son soluciones, ya que este tipo de maltrato rompe los vínculos de confianza y puede marcar a toda una familia durante generaciones. Buscar ayuda profesional, espiritual y comunitaria es indispensable para proteger a los más vulnerables y construir un ambiente seguro.
Escucha este audio en la Plaza del Encuentro y reflexiona junto a la Dra. Marilú Carrera sobre cómo la violencia doméstica destruye vidas y por qué es necesario actuar antes de que deje heridas más profundas.
