Represión estatal en Centroamérica: pastores bajo amenaza y templos en riesgo de cierre

La libertad religiosa, derecho fundamental consagrado en tratados internacionales, se encuentra cada vez más amenazada en algunos países de América Latina. En los últimos meses, se han intensificado las denuncias de líderes evangélicos que enfrentan presiones crecientes por parte de gobiernos que intentan controlar o silenciar las voces disidentes desde los púlpitos. Honduras y Nicaragua se han convertido en focos de preocupación, donde las iglesias evangélicas denuncian abuso de poder, hostigamiento y amenazas de cierre por motivos políticos o ideológicos. Esta situación pone en evidencia un patrón regional que atenta contra los principios democráticos y la autonomía espiritual.
Honduras: Denuncian abuso de poder contra la Iglesia Evangélica
En Honduras, la Iglesia Evangélica ha alzado su voz ante lo que considera una clara intención del gobierno de Xiomara Castro de controlar o silenciar a las comunidades religiosas. En un pronunciamiento reciente, el liderazgo evangélico hizo un llamado al Ejecutivo para cesar el abuso de poder y respetar la libertad de culto. Señalan que algunas medidas gubernamentales buscan socavar la independencia de la Iglesia, interfiriendo en asuntos internos y adoptando actitudes autoritarias.
Uno de los casos más notorios es el del pastor Roy Santos, quien denunció una campaña de desprestigio en su contra y alertó que lo que está en juego no es dinero ni política, sino la libertad de predicar. La diputada Suyapa Figuero, por su parte, afirmó que «este gobierno ya comenzó a ir contra las iglesias, luego vendrá por los medios de comunicación».
Las organizaciones cristianas hondureñas temen que el país esté siguiendo una peligrosa tendencia regional en la que los gobiernos utilizan su poder para intervenir en la vida interna de las congregaciones y su mensaje profético. Piden respeto al derecho constitucional de libertad religiosa y una clara separación entre Iglesia y Estado.
Además, la Alianza Evangélica Mundial y el Instituto Internacional para la Libertad Religiosa ) ha presentado ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU un informe detallando la violencia contra los cristianos en Honduras. Según el informe, en los últimos tres años se han registrado al menos 41 asesinatos, 5 secuestros y más de 200 ataques con violencia física contra cristianos en el país. La WEA instó a la comunidad internacional a tomar medidas para proteger la libertad religiosa y garantizar la seguridad de las comunidades cristianas en Honduras.
Nicaragua: Iglesias evangélicas amenazadas por el régimen Ortega-Murillo
En Nicaragua, el contexto es aún más alarmante. Diversos pastores han denunciado que el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo ha comenzado a presionar sistemáticamente a las iglesias evangélicas independientes para que se sometan a una estructura oficialista: la Federación de Iglesias Evangélicas Nicaragüenses (FIENIC). Aquellas que no se alinean con esta entidad enfrentan amenazas de cierre, pérdida de su personería jurídica e incluso multas desproporcionadas.
De acuerdo con fuentes locales, más de 20 pastores han sido sancionados con multas equivalentes al doble del salario promedio mensual, como castigo por no incorporarse a la FIENIC. Esta estrategia busca silenciar a las voces que aún mantienen autonomía frente al aparato estatal. La amenaza no es nueva: desde 2018, el régimen nicaragüense ha clausurado más de 5,000 organizaciones, entre ellas numerosas iglesias y ministerios cristianos.
El gobierno nicaragüense parece decidido a imponer una única visión religiosa controlada por el Estado, eliminando cualquier espacio de disidencia o crítica. Organizaciones internacionales han expresado su preocupación por esta persecución religiosa que viola los estándares más básicos de derechos humanos y libertad de conciencia.