Jugadores Olímpicos recibirán el libro de Luis Palau
El gobierno chino ha concedido para que Luis Palau distribuya su libro "Dialogo amistoso entre un ateo chino y un cristiano argentino" a atletas y entrenadores durante los Juegos Olímpicos de Pekín.
En este libro, Palau narra la conversación que sostuvo con el ateo Zhao Qizheng – un alto funcionario del gobierno chino. En el mismo se habla de las creencias básicas del cristianismo y la perspectiva que se tiene sobre el cristianismo desde la cultura china y sus creencias.
El permiso para que Palau distribuya su libro se otorga justo un mes después de China anunciase la publicación de 500 mil evangelios inglés y chino en una edición especial para los Juegos Olímpicos con el sello gubernamental. Además se publicarán unas 30 mil copias del Nuevo Testamento en chino e inglés y unas 10 mil Biblias también bilingües.
Las noticias del aparente respeto por parte del Gobierno de China hacia el cristianismo llegan y son contrastadas por la multitud de denuncias de persecución que se están realizando contra los líderes de las iglesias caseras. Según se informó la semana pasada, el presidente de la Fraternidad de Iglesias Caseras y su esposa se vieron obligados este mes a vivir en la calle después de las autoridades chinas en varias ocasiones les obligasen a salir del lugar donde fijaron residencia.
También hace un par de semanas Li Baiguang, destacado abogado de derechos humanos y miembro de una iglesia casera, fue encarcelado por su trabajo poco antes de la reunión que había planificado con los miembros del Congreso de los EE.UU.
A principios de este año, el propietario de la librería cristiana Shi Weihan fue detenido de nuevo por la impresión de Biblias y literatura cristiana sin autorización oficial. Shi gestiona una librería religiosa con el permiso del gobierno de Pekín, pero ha suplido a varias iglesias caseras de material no aprobado oficialmente.
En China, el gobierno supervisa la impresión de literatura religiosa, incluida la Biblia. El gobierno controla el culto religioso y oficialmente sólo permite que asistan a servicios en los lugares permitidos por el Estado.
A los cristianos protestantes que sólo se permite asistir a servicios en las iglesias de los Tres Movimientos Patrióticos, aunque a millones de cristianos asisten a las iglesias no oficiales bajo el riesgo de ser arrestados.