El lunes por la mañana, por primera vez en 33 años, John Piper se despertó sin el título de pastor momento en el cual soltó lágrimas de agradecimiento y de alegría.
“… En cuanto me desperté la mañana de este lunes por primera vez en 33 años sin el manto oficial del pastor, las lágrimas que me vinieron eran lágrimas de gratitud. Y tras ellas una gran alegría. Consumado es. Ha terminado. Dios lo comenzó. Dios lo sostuvo. Dios terminó. Y ha mi me ha gustado “, escribió Piper en su blog, Desiring God.
El día anterior, es decir el domingo de Pascua, Piper predicó exaltando a Jesús como gran pastor de la Iglesia y al concluir oró para que el Señor siga bendiciendo la Iglesia que pastoreó para que continué su crecimiento en unidad.
“Terminar el ministerio en Bethlehem Baptist Church ha sido algo profundo y doloroso. Doloroso por los abrazos llenos de lágrimas de personas que no querían dejarme ir”.
Piper, de 67 años, ha anunciado que se mudará con su familia a Tennessee por un año en mayo para desarrollar la visión estratégica de la iglesia.