Episcopales de EE.UU. suspenden la ordenación de obispos gays
La mediación del arzobispo de Canterbury, Rowan Williams, logró frenar, al menos por el momento, el más que previsible cisma en la Confesión Anglicana, al arrancar de la Iglesia Episcopal de Estados Unidos el compromiso de suspender las ordenaciones de obispos gays y las bendiciones de bodas de homosexuales, hasta que se alcance un consenso mundial sobre el asunto en esta confesión religiosa, con 78 millones de fieles en todo el mundo.
Durante el encuentro que los responsables anglicanos estadounidenses celebraron esta semana en Nueva Orleans, Williams consiguió que el plenario episcopal accediera a «ejercitar la moderación, absteniéndose de consagrar candidatos del episcopado cuya forma de vida presente un desafío al resto de la Iglesia y genere más tensiones en la comunidad».
Al tiempo, los obispos episcopales, que representan a 2,3 millones de fieles, acordaron no realizar en sus diócesis «ninguna bendición pública de uniones entre personas del mismo sexo hasta que se llegue a un consenso».
El cisma en la Confesión Anglicana es un hecho desde que en 2003, los episcopales norteamericanos decidieran designar a Gene Robinson (homosexual declarado y casado con su pareja) como obispo de la diócesis de New Hamshire.
Al borde de la ruptura
Este hecho provocó fuertes críticas en el seno de las iglesias anglicanas africanas y de sectores mayoritarios de la Iglesia de Inglaterra, que amenazaron con separarse de la comunión en caso de que los episcopales -seguidos por las iglesias de Canadá, Escocia y Australia- continuaran con este proceso. De hecho, miles de anglicanos han regresado a la Iglesia católica.
La ruptura estuvo a punto de producirse hace unos meses, cuando los episcopales de EE.UU. designaron a una mujer, la obispo de Nevada Katharine Jefferts Schori, como Primada de esta rama anglicana. Jefferts representa el ala más liberal de la Iglesia Episcopal, y apoya sin fisuras la bendición de las uniones homosexuales.
Por otro lado, la Iglesia Anglicana de Australia decidió ayer permitir la ordenación de mujeres obispos.
Fuente: ABC