No sé cuántas veces te he hablado;
y en mi ira, te he ofendido;
mas, en tu inmenso amor
tu perdón de mì no has retenido.
y en mi ira, te he ofendido;
mas, en tu inmenso amor
tu perdón de mì no has retenido.
¿Cuántas veces he dudado
y tus planes no he seguido?
Sin embargo, me arrepiento y vuelvo;
y siempre me has recibido.
¿Cuántas veces he ensuciado
lo que con tanto amor me has dado?
¿Cuántas veces he caído
y con compasión tu mano me ha levantado?
¿Cuántas veces me has hablado
y tu voz no he escuchado
porque he preferido seguir
lo que el mundo me ha brindado?
Corazón agradecido
hoy me lleva a expresar
lo que con obstinación
me he empeñado en negar.
Sin ti soy nada, Señor,
a todos quiero gritar;
pues, sé cuánto me amas
y yo te quiero agradar.
Jeremías 31:3