Pastor entrega 5 mil dólares a los asistentes a uno de sus cultos
El pastor Paul Peverell decidido innovar durante este fin de semana el culto dominical en su iglesia en Gran Ayton, en North Yorkshire, Inglaterra. Después una prédica basada en hacer el bien al prójimo repartido 1.500 libras esterlinas (casi 5 mil dólares) a los que asistían al culto.
Cada uno de los asistentes obtuvo unas 10 libras, los cuales tenían como objetivo ayudar a las necesidades locales.
En el marco de la fiesta local denominada «festival de la cosecha» Peverell aseguró que ha distribuido el «dinero de Dios a una comunidad enfrenta a tiempos difíciles», y subraya que espera ver que los creyente que lo recibieron expandan una «ola de buena voluntad» en su entorno.
El ministro anglicano entregó el dinero para que los fieles lo usen en acciones que ayuden a los necesitados. De esta manera estima que el mensaje de buena voluntad entre los hombres será más fácil de entender. «Obviamente, hay posibilidades de que algunos no lo hagan. Pero áun así es válido», declaró el pastor a The Sun
Peverell ha hecho incapié que su iglesia a menudo dona dinero a obras de caridad, pero este evento es una forma de ayudar a la comunidad circundante. Al entregar el dinero, el pastor dio sugerencias sobre cómo empler el efectivo recibido. Por ejemplo, la compra de ingredientes para hacer un pastel con el fin de compartirlo con los vecinos, o invitar a un amigo para tomar un café o ir al cine. Su deseo es que la congregación invierta el dinero para tocar las vidas de los residentes que no asisten a la iglesia, con el fin de servir de inspiración a las personas.
Algunos de los miembros de la iglesia manifestaron su incomodidad en recibir el dinero que usualmente es entregado a organizaciones misioneras que buscan reducir la pobreza en el mundo. Sin embargo la mayoría de los asistentes aceptó el reto.
Después del servicio, una ama de casa madre manifestó que estaba pensando en usar el dinero para hacer un pastel que sería vendido y que las ganancias obtenidas serían donadas a la caridad. Por su lado el fotógrafo Stephen Griffiths manifestó que se ofrecía para ayudar en la elaboración de un calendario para una iglesia en Aleppo, Siria. «Esta es sólo otra forma de utilizar el talento y la inspiración de los miembros de la congregación», señaló Griffiths.