Llegó el fin de una era. Delirious? se despidió definitivamente
«El tiempo ha llegado.
Estoy sentado en casa, con ojos vidriosos por las lágrimas, acabo de llegar de dejar a los niños en la escuela. Hay un sonido extraño de «tranquilidad» en la casa. Tan silencioso que se puede escuchar la caldera en ebullición. Mary, nuestra hija de 2 años, no es consciente de este momento crucial en la historia de nuestra familia pero brinca en momentos en que aún no he desempacado la maleta.
Anoche fue el final de una era. El último concierto de Delirious?. ¿Qué puedo decir? Fue impresionante, triste, feliz, definitivo. Uno nunca puede juzgar correctamente las emociones en momentos como estos, pero me siento en paz. Siento alegría. Siento que hayas completado una misión.
En nombre de Stu G, Tim, Jon, y Paul quiero darles las gracias. Gracias por esos 17 años. Gracias por permitirnos ser parte de este gran movimiento en el planeta.
Delirious? ha batido algunos récords, ha cantado en lugares increíbles en el mundo, ha escrito buenas canciones pero… nunca fue por nosotros, siempre fue por ti.
La gente común pero a la vez extraordinaria que se unió de todas las denominaciones, en contra de nuestros prejuicios y de nuestros miedos. Las personas que han permanecidas juntas frente a la adversidad.
Y NOS (Delirious y esas personas) nos hemos convertido en una voz que habla en favor de los oprimidos, de los tienen voz. También nos convertimos en una voz que canta canciones de ‘Dios’ que sacuden la tierra. Amigos, vamos a seguir haciendo temblar la tierra. Nunca dejemos de cantar.
El Salmo 23 ha estado conmigo esta semana:
El Señor es mi pastor, nada me faltará. Él me hace descansar en verdes praderas, me conduce hacia fuentes de aguas tranquilas. El restaura mi alma. Me guiará por sendas de justicia por amor de su nombre. Aunque ande en valle de sombra de muerte, no temeré mal porque tú estás conmigo: tu vara y el cayado me sosiegan. Tú preparas mesa delante de mí en presencia de mis enemigos. Unges mi cabeza con aceite, mi copa rebosa. La bondad y el amor me seguirán todos los días de mi vida, y moraré en la casa del Señor para siempre.
Fabula Est vestri. La historia es tuya.
Este no es el final sino un comienzo fantástico. Una nueva temporada, un nuevo día. Delirious? termina aquí, pero el movimiento de la gente de los hacedores de historia (historymakers) sigue por siempre.
Hago un llamado para que se levanten para ser personas de valor que corran esta carrera hasta el final. A ser hombres y mujeres de Dios.
Hacedores de Historia, vamos a ser esa voz y cantar una canción de adoración, de victoria, de alabanza, una canción de amor. El amor siempre encuentra una manera de irrumpir.
Mientras Anna me trae una taza de té, compartimos una lágrima, una sonrisa, la incertidumbre sobre el futuro. Nos unimos a todos los que están pasando por turnos, cambio, transición. Es en la transición que nos enteramos de lo que realmente somos y lo que estamos viviendo.
Es hora de poner la señal L (que se usa en Europa para indicar que somos aprendices) y volver a la escuela dominical, otra curva de aprendizaje apenas comienza.
Nos vemos en ese lugar.
Martin Smith