Después de décadas de debate, la Iglesia de Inglaterra votará el martes próximo si admite finalmente a las mujeres en la filas de los obispos, bajo un propuesta que ha enfurecido a los creyentes partidarios y contrarios a la ordenación.
La mayoría del Sínodo General, el órgano rector de la iglesia, se inclina por la alternativa, aunque ello no significa que sea segura la aprobación, y una inusual coalición de partidarios y oponentes a la ordenación de las obispas podría derrotar la propuesta. Algunas voces en ambas partes de la ordenación sostienen que el compromiso les obliga a ceder demasiado.
Aunque posibilitaría la entrada de las mujeres en las filas del obispado, la propuesta ante el Sínodo General obliga además a la Iglesia, cuando ordena sacerdotes y obispos, a “respetar” la posición de las parroquias que se oponen, sin definir lo que significa el respeto en términos prácticos.
El arzobispo de Canterbury, Rowan Williams, líder saliente de la Iglesia, ha hecho campaña a favor de la ordenación. “Ya hemos esperado demasiado”, insistió.
Si la votación no alcanza los dos tercios necesarios, el Sínodo General tendrá que comenzar de nuevo. Los funcionarios eclesiásticos dijeron que podrían pasar cinco años para preparar la nueva legislación y completar todas las medidas antes de la votación final.
“La pregunta más dura para todos aquellos que están indecisos”, dijo Williams, “es si el retraso producirá algo mejor”.
Se han producido llamamientos, algo inusual entre los anglicanos, para seguir la corriente mundial.
El obispo Peter Broadbent, del obispado de Willesden, en Londres, pidió una votación “afirmativa” para que la Iglesia “no parezca completamente estúpida ante los ojos de la sociedad” .
Los partidarios del compromiso se muestran esperanzados.
“Pocas, muy pocas personas están contentas con él, pero la gran mayoría lo respaldará ahora”, dijo Sally Barnes, de la entidad Mujeres y la Iglesia, partidaria de la ordenación episcopal de las mujeres. Barnes dijo el lunes que la votación podría ser decidida sobre el número de oponentes que sean persuadidos para abstenerse.
Iglesias anglicanas de Australia, Nueva Zelanda, Sudáfrica y Estados Unidos ya tienen mujeres fungiendo como obispos.
Fuente: AP