El Instituto Cristiano, entidad británica dedicada a promover los valores cristianos en la familia demanada a Google que se ha negado a que se use su canal para concientizar a los internautas en relación al flagelo del aborto.
Esta organización reconocida y de gran estima por los cristianos de Gran Bretaña ha decidido interponer una demanda judicial contra Google, acusándole por discriminación contra los derechos de los creyentes y además alega que esta compañía infringe las leyes británicas.
El Instituto Cristiano basa su demanda en el hecho de haber solicitado Google la contratación de sus servicios publicitarios y la empresa líder en internet se negó rotundamente a prestarselos al considerar que los anuncios de esta campaña tenían "contenido incorrecto". Por ello esta organización cristiana ha decidido demandar esta situación ante los tribunales pues considera que Google discrimina y viola los derechos de los creyetes cristianos.
Colin Hunt, director ejecutivo del Instituto Cristiano afirma que a pesar que Google se define a sí misma como una empresa que fomenta y apoya el intercambio de información e ideas basados en la libertad. Esta libertad es censurada como "incorrecta" cuando un usuario quiere proclamar un mensaje claro de las secuelas nefastas del aborto en la sociedad, pero por otro lado la libertad se torna libertinaje en mensajes publicitarios basados en la pornografía.